Morena ha sabido mover bien sus hilos para pintar a la Península de Yucatán de guinda, con el reciente triunfo de Mara Lezama como gobernadora de Quintana Roo, el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador se apodera del Sureste y está buscando por todos sus medios alcanzar la alcaldía de Mérida en las próximas elecciones.
Con la promesa de convertirlos en candidatos, Morena ha unido a sus filas a políticos de otros partidos, abriendo así su abanico de opciones en Mérida.
Durante la a celebración del onceavo aniversario de la fundación del Movimiento Nacional de Regeneración Nacional (Morena), la dirigente estatal, Alpha Tavera Escalante, dijo que Morena aceptará a militantes de otros partidos políticos que deseen convertirse en candidatos, les advirtió que se deben de “comprometer a no robar y a servir”, pero ¿podrán apegarse a este principio?
Orgullosos de la traición a su partido impulsado por el deseo de poder, algunos políticos se mostraron felices en el encuentro y la foto del recuerdo está circulando en las redes sociales generando todo tipo de comentarios.
La reciente polémica de adhesión a la 4T se dio con el senador Raúl Paz, quien ha sido señalado de oportunista y traidor; sin embargo, no es el único panista que abandona el partido.
Jessica Saidén Quiroz, hija del titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Luis Felipe Saidén Ojeda, quien tiene intención de postularse ahora por ese partido como candidata a la alcaldía de Progreso.
Rafael Echazarreta Torres se registró como aspirante a candidato para la alcaldía de Mérida por el Movimiento de Regeneración Nacional