La reina Isabel II, de 96 años y con crecientes problemas de movilidad, fue aclamada este jueves al aparecer en el balcón del Palacio de Buckingham por una inmensa multitud reunida para celebrar sus 70 años de reinado.
Vestida con abrigo y sombrero azul, la monarca se mantuvo sonriente y de pie, pero apoyándose en un bastón junto a su primo el duque de Kent, coronel de la guardia escocesa, mientras 1,500 soldados desfilaban frente al palacio en el primer día de su Jubileo de Platino.
Tras el desfile, la reina, que fue ovacionada por la multitud, también presenció desde el balcón los vuelos rasantes de los aviones militares, que culminaron con un espectáculo de acrobacias aéreas y despliegue de estelas con los colores rojo, blanco y azul de la bandera británica.
Una formación especial de 15 aeronaves formó el número 70 en el cielo para conmemorar el Jubileo de Platino.
Sin embargo, el paso de los aviones, parece que no fue del todo del agrado de uno de sus bisnietos, hijos de Kate Middleton y el Guillermo de Cambridge, pues las fotos captaron al príncipe Luis cubriendo sus oídos y haciendo gestos ante el ruido que ocasionaban los aviones a su paso.
Pero este pequeño no fue el único, las fotos difundidas en redes sociales muestran las caras de Jorge y Carlota durante el jubileo, situación que llamó la atención de la prensa internacional.
Los gestos del príncipe Luis en la celebración del jubileo de su bisabuela 👉https://t.co/Yw9ROslT88
📷 Daniel Leal (AFP) pic.twitter.com/xsale339UX
— EL PAÍS (@el_pais) June 2, 2022
Organizado anualmente desde hace 250 años para conmemorar el cumpleaños oficial del monarca británico -pero cancelado en 2020 y 2021 debido a la pandemia- este año coincidió con el inicio de los cuatro días de festejos por las siete décadas pasadas en el trono por Isabel II, coronada con solo 25 años y ahora afectada por creciente problemas de movilidad.
“Espero que los próximos días sean una oportunidad para reflexionar sobre todo lo que se ha logrado durante los últimos setenta años, mientras miramos al futuro con confianza y entusiasmo”, afirmó la reina en un mensaje divulgado antes de unas celebraciones, que llegan tras varios escándalos en la familia real y la agravación de su estado de salud.
Cientos de miles de personas se agolparon en los alrededores del palacio, acordonados con barreras metálicas y vigilados por policías con sus característicos cascos abombados.